So special

El cielo antes no era de ese color que lo vemos siempre.
Las leyendas, mitos, habladurías o como quieras llamarles a los rumores que circulan en muchos círculos cerrados, los pocos que quedan aún, y los más pocos con los que puedo tener cierto contacto (cosa que arriesgo al escribir esto) dicen que era de un color similar al verde que se puede ver en los árboles el primer mes del otoño. Menos dicen que era más color turquesa. Yo lo recuerdo como algo indescriptible, un color que nunca la naturaleza ni el hombre ha podido clonar. Lo cierto que debe haber sido un espectáculo, pero lamentablemente no todo el mundo lo sabe y recuerda ese momento, en el que arremolinadas nubes se llevaron todo el color y nos dejaron con este azul, luego de destellos de todas las formas imaginables.
Después de eso vinieron los otros destellos. Y los gritos de muchos. Porque los influyentes ya sabían qué era lo que se venía, el cambio tan radical. Y sabían también qué beneficios les iba a traer a ellos.
Crearon las profecías, ellos mismos. Matemática, metafísica, psicohistoria, ¡no lo sé! Su poder adquisitivo era (y es) tal que tenían todos los medios para saber qué iba a pasar. Y pasó.
Y cuando pasó, estaban listos. Sabían que no podían hacer nada con el color del cielo, eso iba más allá de todo lo que podían hacer (que no es menos, eso lo sabemos todos), por lo que tuvieron que ocultárselo a todos. Por eso los otros destellos que nombré. Por eso los gritos. No es agradable que te extraigan recuerdos así y que los modifiquen. Pero para las víctimas eso no es motivo de trauma, ya que no lo recuerdan. Todos sus recuerdos modificados, una búsqueda sistemática dentro de la mente de cada persona, cada ser LIBRE, y se creyeron con capacidad de inmiscuírse dentro de lo único verdaderamente propio para modificarlo a su gusto. Fotos robadas, recuerdos raídos y repintados, videos rasgados, ¡la mentira esparciéndose por todo el mundo!Todo por el vil dinero, porque el cambio sólo iba a ser efectivo si nada cambiaba. Y para todo el mundo (bueno, casi todo el mundo), nada cambió.
Pero estamos nosotros, que lentamente en estos 17, casi 18 años nos hemos mantenido en las sombras, sin ventilar mucho lo que es verdad, enseñándole a unos pocos, desarrollando tecnologías para que vean lo que está dentro de nuestras mentes, los recuerdos de antes, el cielo de esos colores tan vivos. Incluso les mostramos los recuerdos donde el cielo era de otros colores, de noche era negro y se veían muchísimas estrellas.
Pero ya nada podemos hacer. Esto lo hacemos por amor a la verdad, porque nada de lo que hagamos vencerá al dinero. Y ella ya nació, cambió el color del cielo y hará un mundo mejor para los amantes del poder, haciendo que ellos hagan un mundo peor para los que creen en el poder del amor.
¿Y qué es lo peor? Ella nisiquiera se va a enterar, ella hace su vida normal, la protegen de lejos, vigilan sus amistades, dejan que lleve su curso normal de vida pero eliminan a las malas influencias, porque es la única manera que pueda desarrollar su revolucionaria idea con tan funestas coincidencias.
Lo único que nos queda por hacer, es esperar...